lunes, 6 de mayo de 2013

Pablo Cieslik presenta “Volviendo a casa”

Este joven escritor presenta “Volviendo a casa” en la 39º Feria del Libro. Una novela que relata largas caminatas sobre tierra colorada. Un libro donde se pone en juego el presente actual ecléctico y dinámico contrapuesto al pasado latente y sereno. Un juego donde juegan armónicamente esas dos fuerzas del tiempo  
           
             

Pablo Cieslik presenta la novela "Volviendo a casa” en Buenos Aires junto a otros 9 escritores representantes de Misiones. En esta entrevista exclusiva para VeinteQuinceWeb nos cuenta sobre su obra y experiencias como escritor.

 _ ¿De qué trata Volviendo a Casa?

 Habla sobre el reencuentro con la identidad a través de las cosas cotidianas que uno deja atrás. Toda la novela se desenvuelve a través de un personaje que vuelve a su pueblo de la infancia y allí, a través de experiencias y anécdotas aprende a despedirse, a dar la despedida más importante de su vida”. 

_ ¿Cómo se inició este camino? ¿Cuándo te diste cuenta que querías escribir esta historia?

 Todo empezó cuando empecé a notar cambios en mi propio pueblo de Puerto Iguazú, año tras año crecía, cambiaba, se resignificaba a sí mismo. A la par, mi viejo, que era jefe de guardaparques en su época había dedicado 10 años de investigación con respecto a la Reducción Jesuítica de Santa María del Iguazú, de la cual no se sabía casi nada. Eso conjugado dio como resultado un libro donde se pone en juego el presente actual ecléctico y dinámico contrapuesto al pasado latente y sereno. Un juego donde juegan armónicamente esas dos fuerzas del tiempo”

 -¿Qué representa para vos esta novela?

 Confieso que a través de la novela busqué poder decirle adiós a mi viejo, aceptar esa despedida, traducir esa realidad inefable a través de un relato. Es un alivio poder haber materializado esa experiencia y poder compartirla con un lector, porque eso me hace sentir acompañado, hace que en ese ida y vuelta ambos podamos sentir de alguna manera que hay ciertas cosas inexplicables y trascendentales que forman parte de la condición humana, ennoblece el carácter mortal, efímero y trascendente de estos seres que tienen la mala bendición y la buena maldición de saberse existentes.”

 _ ¿Cuándo te diste cuenta que querías ser escritor?

Siempre tenía un cuaderno bajo la mano, sin embargo, fue con esta novela que sentí una urgencia, una fuerza que me hacía sentir que nada más tenía sentido más que escribir, toda mi vida me maneje de esta manera, pero ahora fue bastante más exacerbado, aunque sea un tanto imprudente. Me dejo llevar por mis pasiones para expresar las cosas, me hace acordar a una frase que alguna vez se la escuché decir a Roberto Sánchez-Pierola: "Todo lo que no es arte es falso".

  _ ¿Es difícil tener como profesión el escribir?

Ser escritor es difícil, pero incluso mucho antes de ser escritor ya es difícil. A una amiga de pseudónimo "Lonelínes" cuando ella le dijo a sus padres que quería estudiar letras modernas sus padres le dijeron "pero mirá que los escritores se mueren de hambre para toda la vida ¿eh?", bueno, digresión aparte.

En Misiones hay muchas fuerzas y ganas para que surjan y se sostengan los escritores que le den letra a la provincia, en estas épocas especialmente, creo que esta cuestión del hambre... digo, del arte, es una cuestión de esfuerzo, esmero, sudor y pasión, yo me siento contenido por mis lectores.

Mi mayor premio es que los lectores misioneros feliciten mi novela y de esta manera encorajo a todo escritor, y especialmente misionero a que se anime y se juegue, que en todo caso no sean sus temores internos los que lo impidan de dar su voz al mundo. finalizó

Escritor audaz, que se hace cargo de sus propios miedos y los registra, que da cada paso sintiendo sus palabras y transmitiendo energía, Cieslik ya está escribiendo su segunda novela, no quiso adelantar nada, solamente que se ambienta en una secundaria en Misiones y trata sobre las sutilezas de vivir en sociedad y hacerse cargo de las propias acciones y valores.

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